Diciembre, uno de los meses más luminosos y a la vez uno de los más oscuros. De camino al coche, brillos y colores sobresalen de ventanas abiertas y cerradas en una ciudad en apariencia tranquila. El 12 marzo de 2020 fue la última actividad cultural abierta al público realizada en el Centro Cultural de la Embajada de Francia en Mérida, Yucatán.

Me concentro en el ir y venir del tráfico decembrino que a momentos me hace olvidar que desde hace más de un año estamos en pandemia. Vuelvo a pensar en diciembre, en esa sensación que me resuena desde siempre, la sensación de haber perdido algo, ese algo en ocasiones incierto. Hace unas semanas me he descubierto a mi misma charlando con amigos haciendo referencia a anécdotas que en mi memoria han pasado el año anterior, para ser corregida con un rotundo “eso fue hace dos años” y entonces darme cuenta de que he perdido un año entero de recuerdos.

Llegamos a la Alianza francesa, con su estructura cristalina y grandes puertas y luces prendidas en su interior. Parece cerrada, de pronto una cara amable nos recibe, la frialdad de una arquitectura de cristal se vuelve cálida a través de las emociones de quien la habita. Qué bien se siente volver a vernos.

En el acceso un lector de temperatura nos dice en francés “Température correcte”, Anita nos conduce al jardín interior, recordamos cómo era, con árboles y plantas recién sembradas tímidas, en franco crecimiento. Ahora el jardín está más frondoso que nunca y el resultado es acogedor. Nos hemos dado cita para la proyección de This Land My Body, un ciclo de cinco piezas de videoarte que exploran y reflexionan acerca del cambio climático a través del cuerpo. Recuerdo que una de las cosas que más me emocionaron de salir a las calles después del encierro obligado, fue reconocer la transformación de la naturaleza. Hoy añoro el momento en el que puedo retirarme el cubrebocas y simplemente respirar, sin duda mi experiencia y conciencia hacia mi tierra, mi cuerpo, hoy es otra.

Manuel Estrella, representante del FESTLAB4X4 en Mérida, junto con Anita Pech, coordinadora de cultura de la Alianza francesa, realizan la presentación y agradecimientos institucionales. Nos preparamos para la proyección. 

La primera pieza, Ten Million Tonnes con coreografía y dirección de Charlotte Edmonds, interpretada por Christopher Thomas, a través de la danza, simboliza el estado físico y emocional de una vida marina afectada por millones de toneladas de plástico que vertemos en nuestros océanos.

Con una copa de vino en mano y un inquietante y repetitivo “Jingle Bells” proveniente de un árbol navideño vecino, intercambiamos sonrisas plagadas de desconcierto que sobresalen del cubrebocas mientras emprendemos un viaje con vista aérea a través de They gave me a map (so I drew them a line) de la escritora y directora chilena / india radicada en Londres, Shalini Adnani. Una pieza creada durante la pandemia que explora la tierra, la pérdida y el desplazamiento. Es un trabajo realizado con imágenes satelitales de Google Earth y de mujeres en duelo.

Un estridente y rítmico sonido acoge el cine jardín de la Alianza francesa cuando entra a escena The Sedate del colectivo Stasis, con la dirección de Daniel Cook y música de Ailie Ormston. Danza, teatro, arte en vivo e instalación. La reflexión desde la composición. Are you ready for it?

Los minutos transcurren con la naturalidad del viento circulante, la cuarta pieza de la noche llega en un suspiro, Ina (Light) videodanza bajo la dirección de Aneil Karia y la coreografía de Alesandra Seutin. Dos bailarines en escena, los performers Nandi Bhebhe y Kennedy Muntanga “luchan” para liberarse de la opresión y guiarnos a través del movimiento y la música de Randolph Matthews a la libertad y la serenidad. Danza urbana y estilos africanos exploran temas contemporáneos. 

Abrupto silencio, pantalla fundida en negro donde se lee “Lo que sucede cuando alguien muere es que nosotros, los vivos, tenemos su memoria dentro de nosotros… Seguirán viviendo, los celebraremos y bailaremos como si no hubiera un mañana”. Diane Torr.

This dance has no end de Fenia Kotsopoulou es un homenaje a la artista, drag king y activista Diane Torr. Durante 10 minutos Fenia ocupa la pantalla sumergida en un fondo negro. Una pieza tan expresiva como contemplativa. Al respecto la artista ha compartido “En silencio escucho las palabras de Diane: Take space with all your being. Own the space. Levanto mis brazos y bailo como si no hubiera un mañana mientras la cámara me sigue. El objetivo no es complacer, sino ofrecerme como sitio para la descarga colectiva”.

Finaliza la proyección. ¡Qué hermoso! Exclama Anita desde el fondo del cine jardín. No ha tomado más de 45 minutos la totalidad de la actividad y siento unas ganas enormes de compartir el momento con otros. Pregunto a Manuel si se puede proyectar el ciclo en otras sedes y fechas fuera del festival, me promete investigar. Quisiera que más personas disfrutaran de las artes vivas en nuestra ciudad. Que salieran de casa a reencontrarse con estos espacios que por tantos meses permanecieron cerrados, espacios que con gran esfuerzo programan actividades culturales gratuitas, que a través de pequeñas audiencias nos alientan a crear comunidad.

Hoy viernes 10 de diciembre puedes visitar la Alianza francesa y vivir esta experiencia en su cine jardín. La cita es a las 19:00 h.

Información adicional:

La Alianza francesa de Mérida se encuentra ubicada en la Calle 23 número 117 esquina con 24, en la Colonia México en Mérida, Yucatán.

This Land My Body es una colaboración entre la edición doce del festival mexicano CuatroxCuatro que este año se denomina FESTLAB4X4 a cargo de Shantí Vera y CASA Festival de Londres. Es producido con el apoyo de Cultura Circular, fondo para el desarrollo de festivales sostenibles del British Council Mexico. La curaduría está a cargo de Cordelia Grierson y Cecilia Kuska, quienes son respectivamente directora artística y productora creativa, co-curadora de CASA Festival.

Para más detalles visita: cuatroxcuatro.org/this-land-my-body.html